- Un artículo de La Razón implicó al Frente Polisario con organizaciones terroristas basándose en medios de información marroquíes.
Por Alfonso Lafarga.- Contramutis
Implicar al Frente Polisario con el terrorismo es falso, absolutamente infundado y de extrema gravedad y su único objetivo es socavar el apoyo social con el que cuenta esta organización a nivel internacional.
Es la respuesta del representante del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, a un artículo publicado en el periódico La Razón, titulado “Marruecos acusa al Polisario de aportar militantes al Estado Islámico en el Sahel”, del que dice carece de rigor, no ha sido contrastado y difunde informaciones falsas.
El autor del artículo, J.M. Zuloaga, se basa en informaciones publicadas en medios marroquíes, concretamente en unas declaraciones del jefe de la Brigada Central de Investigación Judicial (BCIJ) de Marruecos, Habboub Cherkaoui, al semanario Al Ayyam, en el que se vincula a antiguos elementos del Frente Polisario con el Estado Islámico del Gran Sáhara (EIGS), la franquicia de Isis para el Sahel.
El periodista cita al portal Le 360 al afirmar que la “complicidad entre el Polisario y las organizaciones terroristas también se ha demostrado en el curso de las investigaciones llevadas a cabo por los servicios antiterroristas marroquíes y el sucesivo desmantelamiento de células terroristas”.
Le360 está considerado un medio muy cercano a la Casa Real marroquí y a los círculos de poder en Rabat, según han publicado diversos medios, incluida la delegación de la Agencia Efe en Marruecos.
El delegado del Frente Polisario en España habla de falta de rigor en el artículo, que no ha sido contrastado, “considerando la sensibilidad del tema tratado: la repugnante lacra del terrorismo”. Afirma que “asumir como verdad única el relato de una de las partes y contribuir a su difusión implica una violación de la presunción de inocencia de la otra parte y, por ende, una vulneración de su honor”.
Abdulah Arabi dice que es conocida la estrategia de algunos sectores y lobbies que utilizan de forma infame e infundada la acusación de terrorismo con el único objeto de socavar la base de apoyo social con la que cuenta el Polisario a nivel internacional, y que lo que buscan es “atemorizar y menoscabar el movimiento de solidaridad con el Pueblo Saharaui”.
Recuerda el delegado del Polisario que en diciembre de 2019 el Ministerio de Asuntos Exteriores de España desaconsejó viajar a los campamentos de refugiados saharauis en Argelia ante un supuesto riesgo “inminente” de atentado, que nunca se llegó a producir, con el objetivo de empañar la imagen de los campamentos y presionar a las ONG para reducir el apoyo humanitario, “en total sintonía con una campaña orquestada por Marruecos”.
Agrega que durante 29 años, el pueblo saharaui depositó su confianza en la comunidad internacional dando una lección al mundo de dignidad y de resistencia pacífica, y solo ha obtenido el alargamiento sine die del conflicto y frecuentes amenazas de reconocimiento de la supuesta soberanía de Marruecos sobre un territorio que ocupa ilegalmente por la fuerza.
Afirma que Marruecos siempre ha buscado desacreditar al Frente Polisario: “Se nos ha acusado de comunistas, de vietnamitas, de gadafistas… Ahora somos terroristas islámicos de Al Qaeda… Cualquier argumento es válido con tal de desprestigiar nuestra justa causa y resistencia pacífica”.
Abdulah Arabi dice a La Razón que “en lugar de dar voz a relatos no contrastados y documentados, les sugerimos que se refieran a fuentes oficiales, como los servicios de inteligencia de países serios y creíbles, que constatan que ni los saharauis ni el Polisario tienen vinculación alguna con organizaciones terroristas”.
Tras indicar que el articulo no aporta ningún documento ni elemento contrastado que acredite una acusación tan grave, precisa que el Frente Polisario es el único movimiento armado de naturaleza políticomilitar que jamás ha sido calificado de terrorista y que a pesar de llevar movilizado como organización militar cuarenta y cinco años y reivindicando la lucha armada, “nunca ha estado en un listado de organizaciones terroristas, ni siquiera en el muy riguroso y extenso listado del Departamento de Estado de Estados Unidos”. A esto agrega que “las instancias especializadas en la detección y diagnóstico de actividades, estructuras y actores terroristas como Europol, jamás han referido el más mínimo indicio, comentario o análisis que implicara al Frente Polisario”.
“Contribuir a difundir informaciones falsas –concreta- conlleva consecuencias negativas para la memoria -política, histórica y colectiva- de centenares de miles de personas que se identifican con la justa causa del pueblo saharaui. Pero atenta además contra la dignidad de un amplísimo colectivo y, sobre todo, de sus víctimas, de sus exiliados, de las familias forzadas a la separación, de sus refugiados”.
Agrega Arabi que el Estado Saharaui es un estado democrático y la sociedad española conoce la naturaleza real de la lucha del Pueblo Saharaui y su legítima causa por la autodeterminación y la independencia y es consciente de que el Frente Polisario es un actor clave en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo para contrarrestar los efectos del narcoterrorismo orquestado por Marruecos, el principal productor mundial de resina de cannabis que exporta a Europa, África, Oriente Medio y Asia.
“Este tráfico de drogas -agrega- está controlado por redes criminales conectadas a grupos terroristas. Las Fuerzas de Seguridad y Servicios de inteligencia de España han comunicado la existencia de indicios que acreditarían la entrada, mezclados con los inmigrantes, de miembros del Estado Islámico, casi todos de origen marroquí”.
El delegado del Frente Polisario recalca la importancia que tiene contrastar cualquier información que intente asociar su justa lucha y resistencia pacífica “con algo tan deleznable como es el terrorismo, y más aún cuando es una acusación sin pruebas y con una clara intención política, estrategia habitual de Marruecos y de su lobby en España”.
4 Comentarios
Probablemente una de las conclusiones más sólidas que ha llegado la policía europea y la Iterpol, ha sido la relativa facilidad con que los marroquíes y los originarios del reino del homosexual Mohamed 6 lleguen a radicalizarse y cometer actos de atrocidad en la población dé acogida. De los números sobre sale que a nivel europeo el 68% de los atenuados son cometidos por marroquíes y el nivel de radiación aumenta a un 71% esto obedece a nivel cultural bajo con respecto a las estadísticas del país de acogida, niveles bajísimos de integración, entera otros factores pero probablemente el más inquietante sería el que responde a las dos preguntas fundamentales ; que tipo de relación hay entere Marruecos y los terroristas de ese origen y por qué no se da ese patrón en el país de origen? Para responder ha esas preguntas los especialistas suelen partir de la premisa de que Marruecos es un aliado en este tema y a nivel internó no hay mucho que investigar a partir de 2015 y supone un error exponer este tema ya que podría ser un elemento de desestabilización, destacar las pocas líneas realistas que han llegado de un informe de la interno de la Interpol de 2013 llegó a calificar Marruecos país cepa del terrorismo, un informe de la policía Italiana que expresa su preocupación por la lelacion de los criminales marroquí en la cárcel y su radicalización. Entorno a los dos países donde más atentamos han sido cometidos por Marroquíes, con el nivel de criminalidad de esta comunidad es uno de los mas altos y una población presidiario que supone más del 50%, es el caso de las cárceles españolas, donde casi de cada 10 presos 5 son marroquíes, Francia y España tienen entere sus filas informantes y cooperantes de inteligencia marroquíes, de hecho la dependencia es tal que, en un recién publicación de un ex agente del CNI califica de simbiótica casi parasitaría, donde la dependencia del huésped del parásito se turna vital para la seguridad nacional.
ResponderEliminarMarruecos ha intentado asociar la RASD con el terrorismo infinidad de ocasiones, con la popularidad de esta lacra, ha sido uno de sus mantras. Pero la realidad desmiente la propaganda, no hay relación, no hay terroristas saharaui implicados en estos actos, la sociedad es una sociedad pacífica, respetan la legalidad, la mujer, la líneas territoriales, los niveles de criminalidad son de los más bajos del mundo. Pretender asociar un conflicto, legítimo de descolonización/ocupación ilegal, para ganar un poco de rédito y que un periódico como la Razón se preste a esa desinformación no solo es malo para nosotros, y hace bien la RASD en desmentir, sino malo para Marruecos que con esa narrativa los expertos comprenden la realidad de los servicios de inteligencia marroquíes que en su gran parte han fabricado/exportado esa radicalización fuera de sus fronteras de forma intencionada y con uso político, de chantaje y presión territorial al resto de naciones.
Fuentes: http://portal.uned.es/pls/portal/docs/PAGE/UNED_MAIN/LAUNIVERSIDAD/VICERRECTORADOS/GERENCIA/IUISI/COLABORACIONES/048%20DOC021-2005.PDF
Wikipedia
Iterpol
Wiki
“Cuando la ocultación se realiza en el marco de amplias comunidades inmigradas como es el caso de España o Francia los miembros de las células terroristas realizan con más comodidad activas labores de proselitismo y de captación de futuros miembros”
EliminarSe ha demostrado en diversas ocasiones y localizaciónes como los servicios marroquíes juegan a un doble roll en estos nicho, como estrategia frente a sus supuestos aliados y frente a la suspuesta defensa de su comunidades expatriadas. Esa ambigüedad a sido más de una ocasión el detonante de tensiónes y una clara desconfianza por parte de los agentes y cuerpos de seguridad, no ha sido así con las cúpulas y los políticos del liberalismo y pseudo-socialismo occidentales.
“En algunos casos, esa presencia (agentes marroquíes) en los países occidentales es utilizada para intentar cambiar las costumbres, a través del proselitismo entre las poblaciones musulmanas instaladas en ellos, vigentes en sus países de origen; es el caso de los rifeños emigrados a Europa desde el norte de Marruecos entre los que los yihadistas tratan de introducir su visión rigorista y maniquea, hace tan sólo unos años extremadamente minoritaria, adoctrinando a los inmigrantes en suelo europeo para que luego, cuando regresen al país, extiendan el mensaje.”[37]
EliminarComo el hipócrita reinó marroquí ha llevado el mal fuera de sus fronteras y como se gestó y se organizó desde Marruecos gran parte de las actividades . Que a pesar de la cooperación, o supuesta, a delimitado un perímetro nacional y otro más ahí.
Fuentes
[37]CEMBRERO, Ignacio El País 8 de junio de 2003, p. 9.
“Esta visión claramente sesgada (de la noble religión del Islam) podíamos encontrarla aparte de en Europa en otros países del mundo, y en especial del mundo árabe como Marruecos o Arabia Saudí.”
EliminarEs absolutamente erróneo y falaz asociar el pueblo saharaui con este tipo de vertientes, preténdelo o plantearlo a futuro, cual Nostradamus de la seguridad internacional es maliciosamente e inequívocamente para difamar un contendiente en un conflicto claramente delimitado, y que no sobra repetir que obedece a un conflicto de descolonización/ocupación ilegal de un territorio y sus derechos internacional a decidir, y estoicamente no ha sucumbido al territorio frente a su enemigo, el reinó de Marruecos, ni a sus vecinos, sociedad que ha intentando e intenta emancipar un concepto pacifico y religioso sin ningún tipo de mancha en este sentido. Y que no quepa la más mínima duda que Marruecos ha intentado e intenta asociar sus lacras (el territorio, el narco tráfico, etc) como herramienta para desestabilizar sus vecinos, y la relación entre esa lacras son obvias.
Subyugado la independencia del Sáhara, al supuesto, en harás de un “status que” lejos de la realidad que vemos sobre el terreno, la radicalización surge y amenaza occidente desde Marruecos, el Sáhara no tiene nada que ver, no hay ningún tipo de relación empírica. Plantear el Shahel como nueva frontera de combate es ridiculizar lo aprendido por la historia, en cada región, se ha observado que apoyar un régimen tiránico y subyugar los derechos de pueblos, no ha servido para resolver el problema ni aportar más seguridad, sino una militarización y un aumento exponencial de la violencia. Que en término relativos es lo que vemos hoy o caída en estados fallidos que el occidentalismo defendió en su día.
Fuentes
[43]WHITLOCK, Craig: “Moroccans Gain Prominence in Terror Groups” Washington Post Foreign Service 14 octubre 2004