ECS. Madrid. | Los relatores especiales de la ONU sobre la situación de los defensores de los derechos humanos, la libertad de expresión y la tortura, y el Grupo de Trabajo de la ONU sobre la Detención Arbitraria, enviaron un comunicado al gobierno marroquí indicando las violaciones de los derechos humanos que cometen contra la población civil saharaui residente en los territorios ocupados del Sáhara Occidental.
El texto de la comunicación señalaba "Nos preocupa lo que parece indicar la ausencia de seguridad y la existencia de un entorno hostil para los defensores de los derechos humanos en Marruecos y en el Sáhara Occidental."
La misiva también destacó que “la criminalización de activistas de derechos humanos obstaculiza gravemente su capacidad para llevar a cabo su importante labor en defensa de los derechos humanos, y que los actos de tortura, persecución judicial, amenazas y vigilancia constante constituyen un grave ataque contra defensores y organizaciones de derechos humanos, teniendo un impacto negativo en la sociedad civil y otro de carácter disuasorio para trabajar en estos ámbitos.''
A este respecto y en vista de las graves violaciones documentadas, las Naciones Unidas instaron al Reino de Marruecos a brindar información sobre la situación actual de las ocho víctimas, solicitando explicaciones por “las gestiones concretas que se están llevando a cabo para investigar las violaciones y responsabilizar a los responsables, así como las medidas adoptadas para garantizar que los defensores de los derechos humanos en el Sáhara Occidental ocupado realicen de forma segura sus actividades legítimas en un entorno adecuado. Libres de amenazas, acoso, estigmatización o criminalización de cualquier tipo.''
Los mecanismos especiales de Naciones Unidas y el Frente Polisario, han informado al Reino de Marruecos a través de una copia del comunicado enviada a Rabat.
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