Albares habla de "amenazas rusas" desde el flanco sur sin señalar a Argelia y espera que la OTAN reconoce esa "amenaza"

Albares ha hablado sobre sobre el futuro de la OTAN, la guerra de Ucrania y las relaciones de España con Argelia en una entrevista concedida este domingo al diario El País, a unos cuatro días de la celebración de la cumbre de la organización en Madrid.

Por Lehbib abdelhay

Madrid (ECS).- En una entrevista con el diario El País para analizar la cumbre de la OTAN en Madrid y la crisis con Argelia, el ministro de Asuntos Exteriores de España ha vuelto a acusar a Argelia. "Cada vez mas las amenazas del sur son las amenazas rusas desde el sur", dijo Albares. El titular de la diplomacia española sigue insinuando que Argelia actúa siguiendo las ordenes del Kremlin. Albares, desgraciadamente, no ha pillado la complejidad del asunto.

La cumbre de Madrid será la primera que celebre la OTAN en sus 73 años de existencia con una invasión en suelo europeo. Las bombas de Severodonetsk o Lisichans resonarán en el pabellón de la Feria de Madrid (Ifema) donde más de 40 jefes de Estado y Gobierno debatirán cómo hacer frente a un escenario donde la guerra ha sustituido a la diplomacia.

En este contexto; Albares ha defendido la vía diplomática con Argelia para encauzar la crisis diplomática abierta. "Mi deseo como ministro de Exteriores de España es que se retome la diplomacia para que esto se resuelva lo antes posible", ha afirmado en su entrevista con El País.

El jefe de la diplomacia ha evitado hablar de próximos pasos a dar si persiste el bloqueo comercial con Argelia, apuntando a que España no ha hecho nada para encontrarse en esta situación". Eso sí, ha recordado que el Gobierno defenderá los intereses de las empresas españolas. "Por supuesto, desde la firmeza de la defensa de nuestras empresas y anclando esa relación en unos principios que nosotros ofrecemos a todos los Estados de la Comunidad Internacional, y por supuesto nuestros vecinos, también pedimos para nosotros igualdad soberana, respeto mutuo y no injerencia en asuntos internos", ha subrayado Albares.

Sin embargo, Albares ha admitido que “las mayores amenazas para la seguridad de los españoles vienen ahora del Este”. Pero ha añadido que "también hay amenazas desde el flanco sur que el resto de aliados deben reconocer". Albares no señala a Argelia, y se refiere a los grupos terroristas en el Sahel. "Una vez que el Daesh ha bajado en Irak y Siria, el Sahel ha pasado a ser el epicentro del terrorismo mundial. La OTAN ya ha reconocido que la mirada tiene que ser a 360 grados y estoy seguro de que el Concepto Estratégico dará un paso más», ha asegurado.

Sobre el bloqueo comercial, Albares ha evitado hablar de próximos pasos a dar si persiste el bloqueo comercial con Argelia. "Cada vez que detectamos el bloqueo de una operación, lo estamos trasladando a la Comisión, que es quien verifica la situación y tiene los instrumentos para responder a ella. Insisto: lo que nosotros queremos es que sea la diplomacia, el diálogo, la amistad entre los dos pueblos la que se retome", ha explicado.

Afirma que la política comercial está totalmente comunitarizada, pertenece a la Comisión Europea, y es el vicepresidente ejecutivo y comisario de política comercial Dombrovskis quien en estos momentos está analizando esa situación. "Lo que nosotros queremos es tener las mejores relaciones con Argelia desde el respeto mutuo, la soberanía y la no injerencia en asuntos internos", agrega.

España ha dado imagen de debilidad y ha cedido a la presión de Marruecos

«Nuestro país no ha hecho absolutamente nada para encontrarse en esta situación. Lo que queremos es tener las mejores relaciones con el pueblo de Argelia y su Gobierno»

Para Albares, España no acepta presiones de nadie, para ninguna decisión [en política exterior]. España toma sus decisiones de manera soberana y eso es algo que deben entender todos los países del mundo.

Por último, al ser preguntado sobre la instrumentalización de la inmigración o el suministro del gas, el responsable de la diplomacia española ha afirmado que "si se quieren transformar en arma política, lo que es inaceptable, lo pueden hacer. Lo estamos viendo con el gas ruso para presionar a países dependientes del mismo. Pero hay otras: los ciberataques, el terrorismo, la desinformación, el cambio climático. Son las amenazas híbridas", ha concluido.

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