ECSAHARAUI
Madrid (ECS).- El director de la gasista española, Naturgy, Francisco Reynés, ha admitido hoy que el nuevo acuerdo con la estatal argelina Sonatrach sobre la revisión del precio del contrato de suministro de gas a través del Medgaz "no será una buena noticia completa", según adelantó hoy el periódico La Información.
Reynés ha deslizado el golpe que supondrá para España el inminente acuerdo con Sonatrach para la revisión al alza del contrato de suministro de gas natural a través del Medgaz. "El nuevo acuerdo con Argelia no es una buena noticia completa", ha valorado durante un discurso este jueves.
El directivo ha puesto el foco en la compleja relación que une a Naturgy con la empresa argelina después del injustificable giro de Sánchez en el Sáhara Occidental. "Sonatrach es nuestro accionista, nuestro socio y nuestro suministrador", ha dicho.
En este contexto, el director de Sonatrach, Toufik Hekkar, confirmó la semana pasada que el acuerdo con Naturgy se firmará pronto. Naturgy por su parte ha rechazado hacer comentarios hasta este jueves. Como ya avanzó desde principios de septiembre el diario El Confidencial, tras las presiones de Argel, España acabó por aceptar las revisiones de los precios al alza como otras grandes multinacionales europeas como la italiana Eni o Engie, cuando el mercado internacional gasista se ha encarecido hasta un 200%.
Sonatrach y Naturgy tienen un contrato que se extiende hasta 2031, pero con la clausula de que los precios del gas se revisan cada tres años. El último acuerdo entre las dos empresas sobre el alza de los precios llegó tras once meses en que arrancaron las negociaciones. Entonces, la situación de precios del gas era mucho más benévola.
Las negociaciones arrancaron en octubre del año pasado. En este momento, el mercado internacional del gas aún no se mantiene estable. Por aquel entonces, el mercado TTF, la referencia en Europa, cotizaba en alrededor de 40 euros por MWh, mientras que desde este verano ronda los 180 euros MWh, cuatro veces más caro.
La guerra de Ucrania y la amenaza de Gazprom de cortar el suministro de gas al viejo continente, dispararon los precios hasta llegar 366 euros MWh.
Además, y por si esto fuera poco, el contexto geopolítico en la orilla sur de Europa y el norte de África se ha tensionado gravemente. El pasado 18 de marzoz el Gobierno de Pedro Sánchez decidió, con la crisis de precios del gas en máximos, dar un giro histórico a su posición sobre el Sáhara Occidental y alinearse con las tesis de Marruecos, lo que provocó una dura respuesta de rechazo por parte de Argelia, enfrentado históricamente al régimen de Mohamed VI. Argelia dejó de exportar gas por metaneros, en forma de Gas Natural Licuado (GNL), a España.
Aumenta el precio, pero no las entregas de gas a España
“No lo vamos a aumentar, si no requerirá inversión y nuevos gasoductos”, dice desde Argel Hakkar sobre un posible incremento del volumen de exportaciones hacia el mercado español. Tras meses de negociaciones con al menos seis de sus 11 socios, los nuevos precios y volúmenes adicionales permanecen “confidenciales” y se dan en un contexto en el que “el mercado internacional de gas experimenta una subida imparable de los precios”.
En cuanto a un posible incremento del volumen de exportaciones hacia el mercado español, el responsable de Sonatrach aseguró que el gasoducto Medgaz- que une España y Argelia a través del Mediterráneo y es capaz de transportar 11.000 millones de metros cúbicos anuales- se explota en su máxima capacidad, cumpliendo “los contratos al 100% con la parte española”. “No lo vamos a aumentar, si no requerirá inversión y nuevos gasoductos”, subrayó Hakkar.
En conclusión, los acuerdos afectan “al aumento de la cantidad de gas destinada a otros clientes, principalmente Italia, si bien convinieron cantidades adicionales de gas natural para exportar en 2023 y 2024”. Mientras España se conformará con las cantidades contractuales y con una alta subida de los precios.
Sonatrach y Naturgy tienen un contrato que se extiende hasta 2031, pero con la clausula de que los precios del gas se revisan cada tres años. El último acuerdo entre las dos empresas sobre el alza de los precios llegó tras once meses en que arrancaron las negociaciones. Entonces, la situación de precios del gas era mucho más benévola.
Las negociaciones arrancaron en octubre del año pasado. En este momento, el mercado internacional del gas aún no se mantiene estable. Por aquel entonces, el mercado TTF, la referencia en Europa, cotizaba en alrededor de 40 euros por MWh, mientras que desde este verano ronda los 180 euros MWh, cuatro veces más caro.
La guerra de Ucrania y la amenaza de Gazprom de cortar el suministro de gas al viejo continente, dispararon los precios hasta llegar 366 euros MWh.
Además, y por si esto fuera poco, el contexto geopolítico en la orilla sur de Europa y el norte de África se ha tensionado gravemente. El pasado 18 de marzoz el Gobierno de Pedro Sánchez decidió, con la crisis de precios del gas en máximos, dar un giro histórico a su posición sobre el Sáhara Occidental y alinearse con las tesis de Marruecos, lo que provocó una dura respuesta de rechazo por parte de Argelia, enfrentado históricamente al régimen de Mohamed VI. Argelia dejó de exportar gas por metaneros, en forma de Gas Natural Licuado (GNL), a España.
Aumenta el precio, pero no las entregas de gas a España
“No lo vamos a aumentar, si no requerirá inversión y nuevos gasoductos”, dice desde Argel Hakkar sobre un posible incremento del volumen de exportaciones hacia el mercado español. Tras meses de negociaciones con al menos seis de sus 11 socios, los nuevos precios y volúmenes adicionales permanecen “confidenciales” y se dan en un contexto en el que “el mercado internacional de gas experimenta una subida imparable de los precios”.
En cuanto a un posible incremento del volumen de exportaciones hacia el mercado español, el responsable de Sonatrach aseguró que el gasoducto Medgaz- que une España y Argelia a través del Mediterráneo y es capaz de transportar 11.000 millones de metros cúbicos anuales- se explota en su máxima capacidad, cumpliendo “los contratos al 100% con la parte española”. “No lo vamos a aumentar, si no requerirá inversión y nuevos gasoductos”, subrayó Hakkar.
En conclusión, los acuerdos afectan “al aumento de la cantidad de gas destinada a otros clientes, principalmente Italia, si bien convinieron cantidades adicionales de gas natural para exportar en 2023 y 2024”. Mientras España se conformará con las cantidades contractuales y con una alta subida de los precios.
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