Por Lehbib Abdelhay
Madrid (ECS).- Marruecos ha pedido la semana pasada al Fondo Monetario Internacional (FMI) un nuevo préstamo, una línea de crédito flexible (LCF) de un monto de 5.000 millones de dólares. En un comunicado, el FMI explicó en su momento que esta línea ayuda a los países a protegerse "contra los choques externos mediante la adopción de políticas económicas muy sólidas y estableciendo un balance de buenos resultados económicos, gracias a un acceso considerable e inmediato a los recursos del FMI sin condiciones a posteriori".
Seis meses atrás (Agosto de 2022), Marruecos y el Fondo para el Desarrollo Internacional de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) firmaron un acuerdo de préstamo de 100 millones de dólares, según informa la organización en un comunicado de prensa. Cabe destacar que a principios del mismo mes (08/2022) cerró por quiebra la única refinería que había en el país. El préstamos llegó tan solo cinco meses después de recibir otro del Banco Africano de Desarrollo por valor de 120 millones.
En un momento de desaceleración económica que vive el Reino alauita debido al monumental incremento de los precios de los productos básicos según anunció el Alto Comisionado de Planificación, el préstamo tuvo como objetivo modernizar la economía y estimular la recuperación de Marruecos de los estragos causados por la crisis sanitaria de la Covid, según se indica en el comunicado del Fondo OPEP . Ese préstamo está en línea con el Programa de Inclusión Financiera y Digital, cofinanciado con el Banco Mundial, a través del cual el Gobierno de Marruecos se supone que deberá implementar reformas para brindar a los hogares y empresas servicios financieros asequibles, transparentes y sostenibles.
El Director General del Fondo OPEP, Dr. Abdulhamid Alkhalifa, subrayó ''Este préstamo, que se enfoca en la inclusión financiera y digital, ayudará a empoderar a las poblaciones más vulnerables y afectadas, como jóvenes, mujeres, pequeñas empresas y emprendedores, además de apoyar una recuperación económica sostenible''.
Desde 2021, Marruecos ha solicitado numerosos préstamos financieros al Banco Mundial y al Banco Africano de Desarrollo para mitigar el deterioro de la situación social y económica. En Junio de 2022 Marruecos recibió una ayuda de 450 millones de dólares del Banco Mundial, solo dos meses después, pidió una nueva ayuda al FMI -la segunda en un año y medio- ya que en Abril de 2020 recibió unos 3.000 millones del FMI, lo que es hito histórico teniendo en cuenta que no pide financiación desde 2012, y un hecho bastante esclarecedor de la enclenque situación económica del reino alauí que continúa acumulando récords de deuda externa. Mientras el discurso oficial habla durante todo el día sobre la resiliencia de la economía marroquí y el atractivo del reino para los inversores, los indicadores socioeconómicos están en rojo.
En un momento de desaceleración económica que vive el Reino alauita debido al monumental incremento de los precios de los productos básicos según anunció el Alto Comisionado de Planificación, el préstamo tuvo como objetivo modernizar la economía y estimular la recuperación de Marruecos de los estragos causados por la crisis sanitaria de la Covid, según se indica en el comunicado del Fondo OPEP . Ese préstamo está en línea con el Programa de Inclusión Financiera y Digital, cofinanciado con el Banco Mundial, a través del cual el Gobierno de Marruecos se supone que deberá implementar reformas para brindar a los hogares y empresas servicios financieros asequibles, transparentes y sostenibles.
El Director General del Fondo OPEP, Dr. Abdulhamid Alkhalifa, subrayó ''Este préstamo, que se enfoca en la inclusión financiera y digital, ayudará a empoderar a las poblaciones más vulnerables y afectadas, como jóvenes, mujeres, pequeñas empresas y emprendedores, además de apoyar una recuperación económica sostenible''.
El préstamo llega en un momento en el que Marruecos está ahogándose con su deuda externa anotando cifras récord
En Noviembre de 2021 le fue concedido otros préstamos, ésta vez por el Banco Africano de Desarrollo, de 120 millones de dólares destinado al mismo propósito. Un poco después, el Ministerio de Finanzas marroquí avisó que la deuda externa se mantiene en ascenso alcanzando ya al 32% del PIB.
Las crisis bilaterales y la situación económica global han causado verdaderos estragos en la economía marroquí que dependía un 70% del comercio exterior y en parte del turismo, el sector más castigado en los últimos tres años. Con una inédita recesión y la destrucción de más de 500.000 empleos según lo anunciado en el reciente informe del Alto Comisionado de Planificación (HCP) dependiente del Ministerio de Economía, que se traduce en un ascendente paro que ya alcanza un 14,6%. Marruecos, que se encuentra en una crisis económica sin precedentes en el reinado de Mohamed VI, recurre cada vez más a la ayuda extranjera para reactivar una economía azotada por la crisis y que amenaza seriamente con una crisis política tras los recientes acontecimientos políticos en las escenas regional e internacional.
Los analistas afirman que semejante volumen de deudas a largo y medio plazo hipotecará el futuro de las generaciones durante los próximos 30 años, destacando también las cifras que han aumentado en tan solo seis meses en comparación con datos de similares fechas.
0 Comentarios