Ali Mohamed.
ECS. Madrid. | International Crisis Group es una organización sin ánimo de lucro dedicada a resolver conflictos de larga data o conflictos estancados. En este sentido, cumple las condiciones para poner su mirada sobre el Sáhara Occidental, un contencioso sin la más mínima esperanza de solución a corto plazo y bloqueado en mayor medida debido al choque de intereses de las potencias del Consejo de Seguridad y la legalidad internacional, dando lugar a una receta perfecta para el actual estancamiento prolongado.
En su reciente informe de Julio de 2021, la organización no gubernamental concluye que Marruecos se enfrenta a una creciente presión internacional por su vulneración y violación reiterada de los derechos humanos en el Sáhara Occidental, pero en ningún momento relaciona dichas violaciones con la ocupación militar que tiene lugar, de hecho, tampoco menciona al Sáhara Occidental como territorio ocupado y se limita a describir las agresiones de las autoridades marroquíes contra activistas saharauis ''pro-independentistas'' como si de una secesión se tratara.
Contrariamente a las intenciones de la organización, que desconocemos cuáles son, este neolenguaje perjudica gravemente a los saharauis que viven en los territorios militarmente ocupados por Marruecos desde 1975 como la ONU reconoce, y solo beneficia o, en su caso, responde, a la tesis discursiva de Marruecos de vender al exterior el conflicto como una disputa por la integridad territorial marroquí, por lo tanto es un lenguaje que solo beneficia a la potencia ocupante en la medida en que no denuncia ni incide en los verdaderos causantes de la desproporcionada represión marroquí.
Sorprende que la agencia oficial de noticias saharauis, Sahara Press Service, se haya hecho eco del documento y haya publicado una nota en árabe apostillando en reiteradas ocasiones el término ''ocupado'' en el artículo en cuestión. No sabemos si es por engordar su contenido informativo o, deliberadamente, sus periodistas no han consultado ni leído el informe disponible en PDF en la propia página web de la organización. Se trata de un ejercicio de obviedad de dimensiones vergonzosas para un medio estatal, y que se puede leer AQUÍ.
El colmo viene cuando esta organización, en su página web, considera al Frente Polisario como un movimiento ''pro-independentista'' cuando está reconocido y acreditado diplomáticamente como un movimiento de liberación de la última colonia africana, el Sáhara Occidental. El término 'independentista' implica que indirectamente perteneces a un todo, a un conjunto bien definido, sin embargo no se puede ser independentista si nunca has pertenecido a Marruecos y tu descolonización está dictada por la legalidad internacional.
A pesar de que el documento arroja luz sobre la represión marroquí dando nombres de varias víctimas saharauis como Naama Asfari y Sultana Jaya, es insuficiente pues no se centra en la situación que propicia el ambiente represivo ni las causas que originan las violaciones: exigir legítimamente el final de la ocupación marroquí.
Esta prestigiosa organización, antes de patinar, podría haber contactado con los activistas que cita para preguntarles el porqué de su activismo o actividad reivindicativa, del mismo modo, también podría haber consultado un mapa de África que no incluya como territorio marroquí la anexión del Sáhara Occidental. El hecho de ignorar estas sencillas cuestiones apuntan seriamente a su credibilidad para informar sobre un conflicto en curso y la ayuda que puede ofrecer, ya que como ha quedado demostrado, su informe carece de rigor histórico, jurídico, político y geográfico.
Al hilo de lo anteriormente señalado, no podemos ni negar ni confirmar que el documento persiga intereses, pero lo que está claro es que la imparcialidad ha sido sustituida por la arbitrariedad que solo puede obedecer a ciertos distados e inclinaciones que favorecen la posición marroquí.
Como recordatorio, la prestigiosa organización ''NO GUBERNAMENTAL'' International Crisis Group, se trata de un grupo de presión proporcional al dinero ofrecido, está conformada por varios ministros, embajadores, periodistas y expertos en derecho internacional de distintas partes del mundo y que renueva su plantilla cada dos años. Por ejemplo, en el staff de dicha organización se encontraba el embajador francés en Naciones Unidas abiertamente a favor de las tesis marroquíes y que utilizó su poder de veto para ello, se trata de Gérard Araud. Entre ellos también se encuentra un empleado de Mohamed VI perteneciente a los servicios secretos marroquíes y que tiene el encargo de mancillar la causa saharaui en la prensa internacional, se trata del ''juguete roto'' de Ahmed Charai.
En vez de exponer el lenguaje del susodicho informe publicado, la agencia de noticias saharaui cae holgadamente en los brazos de la organización y lo publica a bombo y platillo solo por el hecho de mencionar la represión en el Sáhara Occidental. Como mencionábamos arriba, el hecho de añadir voluntariamente la palabra ''ocupación'' en su artículo pero desaparecida en el informe, solo demostraría, en el peor de los casos, un esfuerzo por engañar a la opinión pública saharaui.
Hace años, en ECS publicamos varios artículos que se referían en concreto a los ''entresijos'' de la mencionada organización, dejamos al lector algunos de los más interesantes para que juzguen con sus propios ojos:
- El Murdoch marroquí penetra en International Crisis Group para influir en las decisiones de Bolton.
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