Conversaciones con Marruecos para traspasar la gestión del espacio aéreo del Sáhara Occidental, que depende de los controladores de las Islas Canarias, según establece la Organización de Aviación Civil Internacional.
El Frente POLISARIO denuncia la errática decisión del Gobierno de España sobre el Sáhara Occidental, sin tener en cuenta la legalidad internacional y contraria a las fuerzas políticas y la sociedad civil española.
Contramutis.-
Madrid (ECS).- El Gobierno prepara traspasar a Rabat la gestión del espacio aéreo del Sáhara Occidental, lo que ha sido considerado por el Frente POLISARIO como una actitud “desesperada” del Ejecutivo de Pedro Sánchez, ante la ausencia de resultados significativos en sus relaciones con Marruecos.
En una respuesta escrita al senador canario Fernando Clavijo, de Coalición Canaria, el Gobierno reconoce que hay conversaciones con Marruecos para la gestión del espacio aéreo del Sáhara Occidental, -dependiente de los controladores de las Islas Canarias según establece la Organización de Aviación Civil Internacional, de la ONU, para cumplir el punto siete de la declaración conjunta que ambos gobiernos firmaron en abril de 2022.
La Moncloa argumenta que se trata de “la gestión de los espacios aéreos y la coordinación entre ambas partes para conseguir mayor seguridad en las conexiones y cooperación técnica».
El mismo día de conocerse los planes del Gobierno, el 22 de marzo, el Frente POLISARIO ha publicado un comunicado en el que rechaza los contactos entre Rabat y Madrid para el traspaso del espacio aéreo saharaui.
El delegado para España del movimiento de liberación saharaui, Abdulah Arabi, denuncia la premeditada actuación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en su errática decisión sobre el Sáhara Occidental, territorio en proceso de descolonización, “sin tener en cuenta la legalidad internacional y contra todas fuerzas políticas y la sociedad civil española”.
Arabi señala que el Gobierno de España “parece desesperado por la ausencia de resultados significativos en sus relaciones con Marruecos, y que ha perdido toda posibilidad de iniciativa, dejando a Marruecos la capacidad de manejar el ritmo y fijar los tiempos de las relaciones bilaterales”.
El representante del Frente POLISARIO cuestiona la decisión del Gobierno de Sánchez de negociar con Marruecos, potencia ocupante, “sobre cuestiones que ya fueron establecidas en la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea en febrero de 2018, incluyendo la falta de soberanía marroquí sobre el espacio terrestre, las aguas y el espacio aéreo del Sahara Occidental”.
Añade que, desde un punto de vista jurídico, “la soberanía del espacio aéreo del Sáhara Occidental pertenece al pueblo saharaui” y que “España es la responsable de lo que ocurra en el territorio ocupado ilegalmente por Marruecos”.
El delegado saharaui condena, también, la idea de abrir una extensión del Instituto Cervantes en la ciudad ocupada de El Aaiún, “lo que cuestiona la credibilidad de esta institución y la pone al servicio de Marruecos para blanquear la ocupación militar del Sáhara Occidental”.
Abdulah Arabi insta al Gobierno español “a rectificar su decisión y volver a la senda del Derecho Internacional, permitiendo que el pueblo saharaui ejerza su legítimo e inalienable derecho a la autodeterminación e independencia”.
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