> La escasez de agua vuelve a amenazar a los campamentos de refugiados saharauis.
Por Lehbib Abdelhay
Por Lehbib Abdelhay
Camión cisterna de agua/campamentos saharauis /archivo |
Desde los campamentos de refugiados saharauis de Bojador (27 de febrero) alertan de la situación que viven más de 10 mil personas en este amplio campo, población que aumenta día a día a medida que el conflicto se extiende y que se ve amenazada estos días por la falta de agua.
Es urgente encontrar una medida para asegurar la supervivencia de estas personas.
Decenas de miles de saharauis se enfrentan con desesperación a la escasez de agua y a una creciente amenaza de enfermedades mortales que amenazan sus vidas.
La mayor población afectada fue Smara (el mayor campamento), vivió unos días difíciles por la falta de agua suficiente para sus necesidades.
Por su parte las autoridades locales no actuaron para hacer frente a la situación a pesar de los llamamientos de organizaciones saharauis y de la sociedad civil (presentada en el parlamento saharaui).
A pesar de la amplia labor de ACNUR y otras organizaciones en el terreno, hasta ahora ha sido imposible encontrar solución segura y fiable para satisfacer las crecientes necesidades del campamento.
La actual ola de calor y la inmimente llegada del mes de Ramadán en las próximas semanas, harán que encontrar una medida sea aún más difícil, y empeorará aún más esta creciente crisis humanitaria.
"Estamos agotados y las opciones en medio de una crisis humanitaria tremenda. Hemos organizado las cisternas para aumentar su trabajo pero no hay suficiente agua disponible para sostener al creciente número de personas que la necesitan", dijo una fuente local a ECS.
El agua se distribuye en camiones de cisternas y se guarda en bloques de chapa de hierro que cada refugiado saharaui guarda cerca de su jaima (tienda de campaña).