Madrid, 04 Agosto de 2019. -(ECSaharaui)
Por Elhadj Mohamed Lamin/ECS
 |
| El Guerguerat permanece cerrado/ECS |
El despliegue de las unidades saharauis también permitirá al ejército rodear y controlar esa región que últimamente está viviendo una escalada de tensión debido al bloqueo a los vehículos de gran tonelaje que cruzan desde Mauritania a los territorios ocupados del Sáhara Occidental ocupado. Cabe destacar que las unidades saharauis se instalaron en esa zona a finales de 2016, informa fuente militar a ECS.
El Ejército de Liberación Popular Saharaui (ELPS) comenzó en los últimos días un despliegue de patrullas para hacerse con el control de la región que desde hace dos meses vive una tensión de tira u floja.
Desde hace más de un mes, una decena de jóvenes saharauis acampan en el pavimento en el lado exterior del puesto militar marroquí en Kandahar (Un tramo entre Sáhara Occidental y Mauritania en el que confluyen decenas de historias errantes muy dispares en apenas 3 km de longitud.). Los marroquíes no pueden intervenir ya que las unidades militares saharauis están controlando la situación, y como es habitual, Marruecos teme una escalada militar con los saharauis.
Por su parte, el presidente saharaui y secretario general del Frente Plisario, Brahim Gali, sostuvo hace un semana, en un discurso pronunciado durante la inauguración del Programa de verano para los jóvenes saharauis, en Chahid Alhafed, que “ los tenemos la obligación de prepararnos para garantizar la protección de nuestro pueblo y la paz perpetua en nuestro territorio”.
Ghali, afirmó que el Gobierno saharaui no descarta la vuelta a la acción armada. "La solución está en las armas", asegura el secretario general del Frente Polisario. El mandatario saharaui aseguró que la guerra llegará tarde o temprano y pide a la juventud prepararse para esta tarea. "La guerra es inevitable, solo falta concertar la hora", recalca.
Por otra parte, la ciudad costera, Nuadibú, capital económica de Mauritania, acoge desde hace dos días reuniones de lo más alto nivel entre representantes de España y la Unión Europea, Marruecos y autoridades mauritanas para encontrar una solución para el desbloquear en el puesto saharaui de El Guerguerat. Los marroquíes se quejan de la presencia de unidades saharauis en las costas del atlántico mientras los mauritanos defienden que el bloqueo en El Guerguerat debe terminar para que la marea europea puede pasar.
Hace tiempo que los armadores españoles (Galicia y Almeria) que faenan en Mauritania han dejado de estar indignados. El malestar ha dado paso al hastío, la impotencia y la desesperación. Hasta están deseando que llegue noviembre para que expire el acuerdo de pesca con el país africano.
Los afectados reprochan la falta de decisión de Marruecos y Mauritania para resolver unos cortes por parte de activistas que, «La verdad no sabemos muy bien que reivindican porque cada un nos dice una cosa distinta», dice un armador español. Pero más críticas merece la tibieza con la que actúa la Comisión Europea. «Desde que en enero nos reunimos con Bruselas no se fijó nada hasta junio, es cuando envió una carta a Mauritania», añade otro armador gallego.
La Comisión Europea pretende esperar a que se abran las negociaciones para renovar el acuerdo de pesca para incluir en el texto la posibilidad de descargar en el puerto saharaui de Dajla (en el Sáhara Occidental) las capturas que se hagan en el caladero mauritano, pero el sector exige que se haga ya. Según han trasladado a sus representantes en el país africano, Mauritania estaría dispuesta a autorizar las descargas en puerto extranjero, pero la gestión debe realizarse a través de las instancias comunitarias.
Marruecos quiere asfixiar a Mauritania a través de El Guerguerat
El área de El Guerguerat, el puesto fronterizo en el extremo sur del Sáhara Occidental, protagoniza una crisis silenciosa entre Marruecos y Mauritania. El pasado 16 de junio las autoridades de ocupación marroquíes bloquearon el puesto fronterizo con Mauritania alegando que una decena de jóvenes saharauis acampan en el pavimento e impiden el paso de los camiones de gran tonelaje. En este caso, las fuerzas de ocupación nunca intervinieron para dispersar a los manifestantes.
En cambio Marruecos obliga así a los barcos que faenan en aguas mauritanas a dejar su mercancía en Dajla (Sáhara Occidental) e incitar a España a que modifique el acuerdo pesquero Unión Europea-Mauritania de tal forma que a los barcos se les permita atracar en Dajla. Hasta ahora no podían hacerlo.
Para eso, Marruecos lleva bloqueando desde hace dos meses el paso de El Guerguerat a los camiones de pescado procedentes de Mauritania hasta que se pudre su mercancía.
Con esta operación de estrategia, Marruecos le da a Mauritania por donde más le duele: su polo económico de Nuadibú; el puerto y las divisas. Y de paso asestar un mensaje claro al nuevo presidente mauritano Uld Gazouani.
Cerca de 800 camiones cargados de pescado y otras mercancías, procedentes de Mauritania, esperan cruzar hacia los territorios ocupados del Sáhara Occidental para poder seguir hacia el interior de Marruecos, y luego a España. Las autoridades de Rabat no están conforme con la idea de que los camiones españoles cargan la pesca mauritana en Nuadibú y cruzan por el Sáhara Occidental, un territorio que ocupa, y Marruecos.
Con esta operación de estrategia, Marruecos le da a Mauritania por donde más le duele: su polo económico de Nuadibú; el puerto y las divisas. Y de paso asestar un mensaje claro al nuevo presidente mauritano Uld Gazouani.
Cerca de 800 camiones cargados de pescado y otras mercancías, procedentes de Mauritania, esperan cruzar hacia los territorios ocupados del Sáhara Occidental para poder seguir hacia el interior de Marruecos, y luego a España. Las autoridades de Rabat no están conforme con la idea de que los camiones españoles cargan la pesca mauritana en Nuadibú y cruzan por el Sáhara Occidental, un territorio que ocupa, y Marruecos.
