Rabat, 08 Agosto de 2020. - (ECSAHARAUI)
Por Lehbib Abdelhay /ECS
El rey de Marruecos, Mohamed VI, envió 4 aviones ayer al Líbano mientras que durante el mismo día, envió decenas de tanques y militares la ciudad de Tánger para reprimir a los ciudadanos que se han manifestado por los estragos causados por el COVID-19, agravados aún más por la desprotección estatal que sufren.
Este jueves, varios tanques del ejército irrumpieron en Tánger para reprimir cualquier tipo de protestas en pleno estado de emergencia sanitaria.
El objetivo de los tanques es impedir la salida de la población afectada por la crisis económica en el país. El estado de alarma adoptado por el régimen presuntamente para limitar la propagación del COVID-19 sirve principalmente para la represión y la tortura. Por ejemplo, obligaron los transeúntes a volver improvisamente en sus casas, mientras salieron en las calles de Tánger para pedir comida y medicamentos ante la desprotección del gobierno.
Esta actitud, cuyo vídeo fue ampliamente difundido en las redes sociales, ha suscitado la ira de los marroquíes, que ven el envío de la ayuda humanitaria al Líbano como un chiste. "Si no pueden garantizar la comida, los medios necesarios y los medicamentos para sus ciudadanos, como pueden enviar ayuda a otra nación", se pregunta un usuario en redes sociales.
Por Lehbib Abdelhay /ECS
El rey de Marruecos, Mohamed VI, envió 4 aviones ayer al Líbano mientras que durante el mismo día, envió decenas de tanques y militares la ciudad de Tánger para reprimir a los ciudadanos que se han manifestado por los estragos causados por el COVID-19, agravados aún más por la desprotección estatal que sufren.
Este jueves, varios tanques del ejército irrumpieron en Tánger para reprimir cualquier tipo de protestas en pleno estado de emergencia sanitaria.
El objetivo de los tanques es impedir la salida de la población afectada por la crisis económica en el país. El estado de alarma adoptado por el régimen presuntamente para limitar la propagación del COVID-19 sirve principalmente para la represión y la tortura. Por ejemplo, obligaron los transeúntes a volver improvisamente en sus casas, mientras salieron en las calles de Tánger para pedir comida y medicamentos ante la desprotección del gobierno.
Esta actitud, cuyo vídeo fue ampliamente difundido en las redes sociales, ha suscitado la ira de los marroquíes, que ven el envío de la ayuda humanitaria al Líbano como un chiste. "Si no pueden garantizar la comida, los medios necesarios y los medicamentos para sus ciudadanos, como pueden enviar ayuda a otra nación", se pregunta un usuario en redes sociales.
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