“La ficha S es un instrumento policial, (…) no una prueba en sí misma, y solo interesa si las personas implicadas no saben que lo están”.
La Policía de Francia sospecha que un ex policía transfirió cerca de 200 documentos confidenciales a un agente secreto marroquí a través de un intermediario responsable de la seguridad del aeropuerto.
Madrid, 26 Agosto de 2020. -(ECSAHARAUI)
Por Lehbib Abdelhay/ECS
Cerca de 200 documentos confidenciales, especialmente los archivos "S", fueron enviados a los servicios secretos marroquíes: un ex policía francés de las fronteras de Orly y un director de seguridad del aeropuerto serán juzgados en Créteil, sospechosos de haber organizado la filtración de información sensible a un país extranjero entre 2014 a 2017, informa Le Monde.
La filtración se ha llevado a cabo en el segundo aeropuerto más grande de Francia, Un ex policía, ahora retirado, era entonces el jefe de la unidad de información del personal de la Policía de Fronteras (PAF), un servicio encargado de reportar información en los pasillos del aerodromo y de las personas que figuran en el Registro de Personas buscadas. Entre sus tareas figura la gestión y el manejo de los archivos "S", de la "Seguridad del Estado", que busca capturar a personas sospechosas de radicalización islamista.
El otro protagonista del caso, un franco-marroquí de 57 años conocido en el microcosmos de Orly, era entonces el director de una empresa de seguridad aeroportuaria y habría actuado como intermediario con un agente secreto marroquí interesado en estos datos confidenciales clasificados Top Secret.
Los "topos" disfrutaron de dos viajes de lujo a Angola y Marruecos
En total, el ejecutivo de la PAF habría enviado de 100 a 200 archivos confidenciales, a cambio de viajes con todos los gastos pagados a Marruecos o Angola, según la orden de remisión de 30 de julio de la que tenía conocimiento AFP. La investigación también sacó a la luz "una cantidad de dinero de origen desconocido" de 17.000 euros en la cuenta del policía y su esposa, una pareja endeudada, desde octubre de 2014 hasta mayo de 2017. “En ese momento, mi cliente estaba convencido de que estaba actuando en el mejor interés de Francia. Se le ofrece colaborar con Marruecos. Para él, es una forma de monitorear los expedientes “S” y evitar nuevos ataques”, defendió Blandine Russo, abogado del ex policççia imputado, según recoje AFP.
Según la investigación, el intermediario habría tenido un "papel clave" en la transmisión de los archivos confidenciales, varios de los cuales fueron encontrados en su casa y en su oficina. También se cree que organizó los viajes al exterior del ex policía francés y su familia, algo que negó durante sus audiencias, y culpaba al policía francés de la iniciativa.
Los dos hombres están siendo procesados por "corrupción, violación y ocultación del secreto profesional, malversación y ocultación del propósito del procesamiento de datos personales". El agente marroquí, con un registro en la localidad francesa de Alsacia, sigue siendo imposible de rastrear. Sujeto a una orden de arresto, está siendo procesado por "corrupción activa".
Robo de drogas en un hospital
La esposa del policía también aparecerá en el banquillo de los acusados. Habiendo considerado los magistrados que no podía desconocer el origen de los viajes, comparecerá por "ocultamiento de bienes a la corrupción" pero también por robo de drogas - entregadas al intermediario - en el hospital donde trabajaba como auxiliar de enfermeria. También está siendo acusado otro funcionario de la PAF.
Al inicio de la investigación, una fuente cercana a los servicios marroquíes explicó a AFP que la contratación de "topos" susceptibles de aportar información se centró en "puntos de debilidad" y las posibilidades de chantaje sobre estas faltas (dificultades financieras relacionado con deudas o juego, hábitos sexuales, compromiso ideológico, etc.). “Hay gente en todas partes dispuesta a ser convencida, es legítimo”, dijo el agente marroquí.
Terrorismo: ¿que es un archivo "S"?
Poco conocido por el público en general antes de los de ataques terroristas de los últimos tres años, la letra "S" («sûreté de l’Etat») se ha convertido en una noticia recurrente. Pero que es exactamente? ¿A quién se dirige? ¿Qué implica para las personas así registradas?
Más de 400.000 nombres figuran en este archivo.
El archivo "S" es en realidad solo una de las muchas categorías en un archivo: el archivo de personas buscadas (FPR) - un término genérico ya que para algunas categorías es solo supervisión.
A excepción de los formularios "J" y "PJ", que corresponden a personas buscadas por la justicia o la policía, los expedientes, como el "S", no implican ninguna acción automática de coacción contra 'una persona. Estos archivos tienen un papel sobre todo en el contexto de las investigaciones antiterroristas, asegura el ministerio de la justicia de Francia.
Creado en 1969, este archivo contendría más de 400.000 nombres, ya sean menores fugitivos, fugitivos de prisión, miembros del crimen organizado, personas a las que los tribunales les prohíban salir del territorio, pero también activistas políticos o medioambientales (antinucleares, anarquistas, etc.).
Cada categoría tiene una nomenclatura, en forma de letra: "M" para menores fugitivos, "V" para fugitivos ... El RPF (Policía Frontera de Francia) tiene 21 categorías en total, según la Comisión Nacional de Informática y Libertades de Francia (CNIL), que proporciona diez ejemplos:
"E" (policía general para extranjeros);
“IT” (inadmisibilidad);
“R” (oposición a la residencia en Francia);
"TE" (oposición a la entrada en Francia);
"AL" (loco);
“M” (menores fugitivos);
"V" (fugitivos);
"S" (seguridad del estado);
“J” y “PJ” (registros policiales judiciales);
"T" (deudores de Hacienda) ...
La Policía de Francia sospecha que un ex policía transfirió cerca de 200 documentos confidenciales a un agente secreto marroquí a través de un intermediario responsable de la seguridad del aeropuerto.
Madrid, 26 Agosto de 2020. -(ECSAHARAUI)
Por Lehbib Abdelhay/ECS
Cerca de 200 documentos confidenciales, especialmente los archivos "S", fueron enviados a los servicios secretos marroquíes: un ex policía francés de las fronteras de Orly y un director de seguridad del aeropuerto serán juzgados en Créteil, sospechosos de haber organizado la filtración de información sensible a un país extranjero entre 2014 a 2017, informa Le Monde.
La filtración se ha llevado a cabo en el segundo aeropuerto más grande de Francia, Un ex policía, ahora retirado, era entonces el jefe de la unidad de información del personal de la Policía de Fronteras (PAF), un servicio encargado de reportar información en los pasillos del aerodromo y de las personas que figuran en el Registro de Personas buscadas. Entre sus tareas figura la gestión y el manejo de los archivos "S", de la "Seguridad del Estado", que busca capturar a personas sospechosas de radicalización islamista.
El otro protagonista del caso, un franco-marroquí de 57 años conocido en el microcosmos de Orly, era entonces el director de una empresa de seguridad aeroportuaria y habría actuado como intermediario con un agente secreto marroquí interesado en estos datos confidenciales clasificados Top Secret.
Los "topos" disfrutaron de dos viajes de lujo a Angola y Marruecos
En total, el ejecutivo de la PAF habría enviado de 100 a 200 archivos confidenciales, a cambio de viajes con todos los gastos pagados a Marruecos o Angola, según la orden de remisión de 30 de julio de la que tenía conocimiento AFP. La investigación también sacó a la luz "una cantidad de dinero de origen desconocido" de 17.000 euros en la cuenta del policía y su esposa, una pareja endeudada, desde octubre de 2014 hasta mayo de 2017. “En ese momento, mi cliente estaba convencido de que estaba actuando en el mejor interés de Francia. Se le ofrece colaborar con Marruecos. Para él, es una forma de monitorear los expedientes “S” y evitar nuevos ataques”, defendió Blandine Russo, abogado del ex policççia imputado, según recoje AFP.
Según la investigación, el intermediario habría tenido un "papel clave" en la transmisión de los archivos confidenciales, varios de los cuales fueron encontrados en su casa y en su oficina. También se cree que organizó los viajes al exterior del ex policía francés y su familia, algo que negó durante sus audiencias, y culpaba al policía francés de la iniciativa.
Los dos hombres están siendo procesados por "corrupción, violación y ocultación del secreto profesional, malversación y ocultación del propósito del procesamiento de datos personales". El agente marroquí, con un registro en la localidad francesa de Alsacia, sigue siendo imposible de rastrear. Sujeto a una orden de arresto, está siendo procesado por "corrupción activa".
Robo de drogas en un hospital
La esposa del policía también aparecerá en el banquillo de los acusados. Habiendo considerado los magistrados que no podía desconocer el origen de los viajes, comparecerá por "ocultamiento de bienes a la corrupción" pero también por robo de drogas - entregadas al intermediario - en el hospital donde trabajaba como auxiliar de enfermeria. También está siendo acusado otro funcionario de la PAF.
Al inicio de la investigación, una fuente cercana a los servicios marroquíes explicó a AFP que la contratación de "topos" susceptibles de aportar información se centró en "puntos de debilidad" y las posibilidades de chantaje sobre estas faltas (dificultades financieras relacionado con deudas o juego, hábitos sexuales, compromiso ideológico, etc.). “Hay gente en todas partes dispuesta a ser convencida, es legítimo”, dijo el agente marroquí.
Terrorismo: ¿que es un archivo "S"?
Poco conocido por el público en general antes de los de ataques terroristas de los últimos tres años, la letra "S" («sûreté de l’Etat») se ha convertido en una noticia recurrente. Pero que es exactamente? ¿A quién se dirige? ¿Qué implica para las personas así registradas?
Más de 400.000 nombres figuran en este archivo.
El archivo "S" es en realidad solo una de las muchas categorías en un archivo: el archivo de personas buscadas (FPR) - un término genérico ya que para algunas categorías es solo supervisión.
A excepción de los formularios "J" y "PJ", que corresponden a personas buscadas por la justicia o la policía, los expedientes, como el "S", no implican ninguna acción automática de coacción contra 'una persona. Estos archivos tienen un papel sobre todo en el contexto de las investigaciones antiterroristas, asegura el ministerio de la justicia de Francia.
Creado en 1969, este archivo contendría más de 400.000 nombres, ya sean menores fugitivos, fugitivos de prisión, miembros del crimen organizado, personas a las que los tribunales les prohíban salir del territorio, pero también activistas políticos o medioambientales (antinucleares, anarquistas, etc.).
Cada categoría tiene una nomenclatura, en forma de letra: "M" para menores fugitivos, "V" para fugitivos ... El RPF (Policía Frontera de Francia) tiene 21 categorías en total, según la Comisión Nacional de Informática y Libertades de Francia (CNIL), que proporciona diez ejemplos:
"E" (policía general para extranjeros);
“IT” (inadmisibilidad);
“R” (oposición a la residencia en Francia);
"TE" (oposición a la entrada en Francia);
"AL" (loco);
“M” (menores fugitivos);
"V" (fugitivos);
"S" (seguridad del estado);
“J” y “PJ” (registros policiales judiciales);
"T" (deudores de Hacienda) ...
"Graves amenazas a la seguridad pública"
Con mayor frecuencia es la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI), el servicio de inteligencia francés, la que produce los archivos "S". Sin embargo, dicho expediente puede ser expedido para dar seguimiento a información de otros países o en el marco de colaboraciones internacionales: el interesado puede o no estar en territorio francés.
En la mayoría de las categorías del RPF, el registro suele ser posterior a una decisión administrativa, judicial o fiscal: estamos en la lista "T" si las autoridades fiscales están interesadas en nosotros, o "V" si nos hemos escapado de prisión. El caso del expediente "S" es particular: se trata de personas de las que uno (Francia u otro país, ya que este expediente es europeo) sospecha de fines terroristas o de atentado contra la seguridad del Estado (o complicidad), sin haber cometido delito alguno. Por tanto, pueden ser simples conexiones de un terrorista conocido.
La ley es además vaga en este tema: puede ser objeto de un archivo "S" todas las personas "son objeto de investigación para prevenir amenazas graves a la seguridad pública o la seguridad del Estado, tan pronto como se haya recopilado información real o pistas sobre ellos”.
El propio archivo "S" se subdivide en varios niveles materializados por números, que van desde "S1" a "S16". Al contrario de lo que hemos leído, explica el Ministerio del Interior francés, este nivel de cifras no corresponde a la "peligrosidad" de una persona, sino a las acciones a tomar por el miembro de la policía quien controla a esa persona. Así, S14 corresponde recientemente a combatientes yihadistas que regresan de Irak o Siria.
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