Por Salem Mohamed /ECS
La multinacional noruega DNV GL anunció hoy la suspensión de sus actividades comerciales en el Sáhara Occidental ocupado. La compañía envió hoy a WSRW un comunicado de prensa en el que anunció su retirada definitiva del territorio, según informa la ONG en una nota.
El 22 de marzo, la Asociación de Amistad y Apoyo al pueblo saharaui de Noruega y WSRW se quejaron ante la empresa de certificación por un nuevo contrato que se rumoreaba que habían iniciado en el Sáhara Occidental ocupado.
El caso se ha cerrado definitivamente. La empresa emitió hoy un comunicado de prensa en el que afirma que el consejo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Noruega no le ha notificado de la ilegalidad de comercializar en el Sáhara Occidental. "Esto ya se ha paralizado y no vamos a celebrar más contratos para actividades comerciales en el Sáhara Occidental”, dijo la multinacional.
“Felicitamos a DNV GL por la eliminación gradual de su proyecto en el Sáhara Occidental y agradecemos que se abstengan de seguir participando en el territorio. El anuncio muestra lo importante que es que las empresas internacionales más grandes tengan políticas claras sobre el comercio en territorios ocupados", dijo Erik Hagen, gerente general de WSRW.
El desarrollo de proyectos de turbinas solares y eólicas para Marruecos en los territorios ocupados del Sáhara Occidental avanza a un ritmo explosivo y hoy constituye un factor importante en el conflicto.
“El proyecto energético del operador estadounidense se está llevando a cabo violando el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui. También apoya directamente la anexión del territorio por Marruecos. Las empresas noruegas no deberían participar en el apoyo a tales violaciones de los derechos humanos”, recalca Erik Hagen.
La ministra de Relaciones Exteriores de Noruega, Ine Marie Søreide Eriksen, dijo en junio del año pasado, que “desde 2007, las autoridades noruegas han desaconsejado a las empresas e industrias noruegas que se involucren en el comercio, la inversión, la utilización de recursos naturales y otras formas de negocios en el Sáhara Occidental que no estén de acuerdo con las aspiraciones del pueblo saharaui y, en consecuencia, puede ser contrario al derecho internacional.
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