Por Lehbib Abdelhay /ECS
El régimen marroquí parecía sentir el peligro de violar el alto el fuego, que había provocado el estallido de la guerra en el Sáhara Occidental.
Tras la intensificación de los ataques del ejército saharaui a lo largo del muro militar y sus repercusiones en Marruecos, Rabat intensificó sus contactos, especialmente con las grandes potencias, en un intento por detener la guerra.
La cancillería rusa reveló el contenido de una llamada telefónica entre el canciller ruso Sergey Lavrov y el canciller marroquí a solicitud de este último.
La reunión se centró en la situación actual en el Sáhara Occidental, donde la parte rusa afirmó su posición de principio, que afirma la necesidad de resolver el problema del Sáhara Occidental de conformidad con el derecho internacional y mediante negociaciones diplomáticas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia pidió a Marruecos y al Frente Polisario que se calmen y eviten la escalada.
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