Campamento de El Aaiún, 26 Diciembre de 2020. - (ECSAHARAUI)
Por Lehbib Abdelhay /ECS
Soldados saharauis a su llegada a los campamentos saharauis /ECSAHARAUI
Los residentes del campamento saharaui de El Aaiún, Smara, Auserd y Bojador, así como Dajla tomaron esta tarde las calles de los campamentos de refugiados saharauis para expresar su gratitud a los soldados que iniciaron el ataque el pasado 13 de Noviembre y manifestar su decepción y rechazo al estancamiento actual en el Proceso de Paz en el Sáhara Occidental, señalando en este contexto que la lucha armada seguirá hasta la liberación total del Sáhara Occidental.
El pueblo saharaui recibió hoy con gran euforia y gestos de gratitud a los soldados saharauis que iniciaron el ataque contra las fuerzas de ocupación marroquíes el pasado 13 de Noviembre que violaron el alto el fuego. Los combatientes fueron recibidos como héroes mientras el ambiente coreaba distintos lemas tradicionales por la libertad e independencia.
El convoy llegó esta misma tarde recientemente entrando por las wilayas. Tras 44 días en el frente de batalla, estos soldados han podido regresar tras el reforzamiento de las posiciones saharauis.
La multitud, con banderas de la RASD y coreando lemas, denuncia además el incumplimiento por parte de la ONU de sus obligaciones relacionadas con la celebración de un referéndum de autodeterminación en el territorio, así como su falta de seriedad para asumir la responsabilidad de lo que pueda resultar de las tensiones actuales en la seguridad y estabilidad de la región.
El 29 de abril de 1991, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas estableció la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO). Durante 29 años, un destacamento de 230 soldados ha sido responsable del mantenimiento de la paz en este territorio. También está a cargo de organizar el referéndum. El proceso está estancado por la intransigencia marroquí.
Sin embargo, la ONU sigue haciendo creer al pueblo saharaui que puede solucionar el conflicto con informes o declaraciones periódicas para levantar el ánimo a los saharauis, una jugada sociológica muy sucia que, sorprendentemente, aún les funciona. La realidad es que el conflicto saharaui y el asunto del último país africano sin descolonizar ha sido un colosal fracaso, absoluto y sin precedentes para la ONU, por mucho que traten de maquillarlo.
45 años colonizados y tirados en mitad de un desierto remoto, es demasiado, y cada día que pasa, más lejos están de la independencia y permiten a Marruecos consolidarse y afianzarse aún más. Cada saharaui debería repasar el pasado y ver si realmente han avanzado algo en el conflicto o este ha empeorado.
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