Marlaska, ministro del Interior, rechazó acoger a Ghali mientras que Laya, de Exteriores dio su visto bueno.

Sidi Maatala/ECS

El Frente Polisario tiene una larga tradición de opacidad a la hora de informar.

El Secretario General del Frente Polisario, Brahim Ghali, fue ingresado el pasado domingo en el complejo hospitalario de San Pedro de Logroño (La Rioja) tras contraer Covid y enfermo además de un cáncer. España le acogió “por razones estrictamente humanitarias”, según ha declarado la ministra de Exteriores Arancha González Laya. Los saharauis, tanto aquellos de los campamentos de refugiados como los que residen en los territorios ocupados de la antigua colonia española se enteraron primero la suerte de su líder a través de la prensa enemiga. El digital marroquí, o el núcleo duro del Majzén, “Le 360”, fue el primero en dar la noticia que retomaron rápidamente medios de comunicación franceses, como Jeune Afrique, y posteriormente parte de la prensa española, como 20Minutos, La Razón, La Rioja... entre otros.

Según ha desvelado ayer Ignacio Cembrero en un extenso artículo publicado en El Confidencial, "en el Gobierno español hubo discrepancias sobre si aceptar o no la solicitud de atención médica del líder del Frente Polisario". Según la misma fuente, el ministro del Interior de España, Fernando Grande-Marlaska, se resistió, temeroso de que tuviese consecuencias negativas en la relación con Marruecos. Su colega de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, se mostró, en cambio, favorable, pero tomó la precaución de informar por cortesía a Rabat. "(…) para nada esta cuestión ni impide ni perturba las excelentes relaciones que España tiene con Marruecos", comentó la ministra a la prensa.

Ghali asumió el mando poco después del fallecimiento de Mohamed Abdelaziz, quien murió en un hospital de EE.UU por un cáncer, algo que el Polisario aún no ha confirmado hasta ahora. Otros dos responsables saharauis de alto rango han fallecido recientemente en España. El líder político saharaui, Mhamad Jadad, el auténtico jefe de la diplomacia saharaui, falleció de cáncer, el uno de abril de 2020, en un hospital de Madrid. Dos años antes, en abril de 2018, otro cáncer, de pulmón, acabó con la vida Bujari Ahmed, representante saharaui ante Naciones Unidas, en el Hospital de Cruces, en Baracaldo (Vizcaya). 

Horas después de que trascendiese la noticia del ingredo de Ghali en España, el Consejero de la presidencia de la República Árabe Democrática Saharaui (RASD), Bachir Mustafa Sayed, negó hoy a Efe que el presidente y Secretario General del Frente Polisario, Brahim Ghali, se encuentre hospitalizado en España y aseguró que el líder saharaui está en un hospital de Argelia, donde es tratado de Covid-19 y su "evolución mejora", informa Efe. 

"Sí, acaban las autoridades saharauis, mediante fuente autorizada, de confirmar la noticia relativa al estado de salud de nuestro presidente Brahim Gali. Se encuentra en hospital en Argelia. Su estado de salud evoluciona de estabilidad hacia la mejora notable. Se espera recuperación pronta", asegura a Efe a través de un mensaje Bachir Mustafá Sayed. Más tarde la presidencia de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) admitió en un comunicado difundido por SPS que Ghali estaba enfermo, pero seguía “recuperándose de forma favorable”. No precisó donde se encontraba.

Tras guardar silencio durante un día, la ministra de Asuntos Exteriores de España, Arancha González, ha confirmado que Brahim Gali se encuentra en España por razones estrictamente humanitarias para recibir un tratamiento médico «y por eso voy a guardar la mayor discrección por ser una cuestión médica».

La jefa de la diplomacia española ha eludido dar más explicaciones sobre su traslado y ha negado que suponga algún problema en las relaciones de España con Marruecos. «No voy a entrar en ningún detalle adicional en esta cuestión, que ni impide ni perturba las excelentes relaciones que España tiene en común con Marruecos, que es un» socio prioritario de este país y eso no cambia».

La ministra, que ha ofrecido una rueda de prensa conjunta con su homólogo de Palestina, Riad Malki, tras la reunión bilateral que han mantenido hoy en Madrid, ha hecho hincapié en que «España un país responsable en sus obligaciones humanitarias», pero no ha querido responder a las preguntas de los periodistas.