La represión marroquí contra los activistas saharauis de CODESA llega al Departamento de Estado y al Senado de los EE.UU.

ECS. Washington. | Global Liberty Alliance, organización estadounidense, anunció que se había puesto en contacto con el Departamento de Estado y el Senado de los Estados Unidos por el caso del secuestro y tortura del jefe de la Asociación de Defensores de Derechos Humanos Saharauis (CODESA) Babouzeid Mohamed Saeed Al Bahi y sus compañeros militantes, Salek Baber y Jaled Boufriwa. La organización también presentó una solicitud al Departamento de Estado de Estados Unidos para exigir que Marruecos se someta y respete las obligaciones internacionales que se le imponen y respete los derechos básicos del pueblo saharaui en los territorios ocupados.

En el mismo contexto, la Global Liberty Alliance afirmó que tendrá la labor, junto con otras organizaciones, de defender estas cuestiones y trabajar junto a CODESA para responsabilizar a los culpables de este acto criminal y otros actos cometidos contra civiles saharauis.

La organización estadounidense también advirtió del aumento de las violaciones de derechos humanos por parte de la ocupación marroquí contra el pueblo saharaui desde la declaración ilegal del ex presidente Donald Trump, añadiendo que la nueva administración estadounidense debe dejar claro a Marruecos que el acuerdo de diciembre con la anterior administración no constituye un permiso para que viole los derechos básicos del pueblo saharaui sin rendir de cuentas ni sanciones.

En los últimos días, la represión marroquí ha alcanzado a figuras destacadas del activismo saharaui, con violentas agresiones y allanamientos de morada. Militantes de las asociaciones saharauis CODESA, ISACOM y la Asociación para la Vigilancia de la Riqueza y Medio Ambiente del Sáhara Occidental. Uno de los últimos en sufrir en sus carnes la brutalidad de las fuerzas represivas marroquíes fue Babouzeid, presidente de CODESA, y los activistas Salek Baber y Khalid Boufraioua, quienes fueron secuestrados durante el allanamiento de la casa de Sultana Jaya. Les torturaron mientras estaban esposados y les dejaron tirados y abandonados en el desierto, a unos 120 Km al norte de la ciudad ocupada de Bojador.

La represión marroquí escala paralelamente al conflicto armado, así lo evidencia nuestro informe donde registramos todas las violaciones que cometieron las fuerzas de ocupación marroquíes en los territorios ocupados desde que se inició la guerra el 13 de Noviembre. La situación actual no parece que vaya a mejorar, lamentablemente el pueblo saharaui seguirá expuesto a las atrocidades del régimen marroquí bajo el manto de impunidad que le otorga el silencio de la comunidad internacional.