Por Lehbib Abdelhay /ECS
Bruselas (ECS). - Jordi Cañas, eurodiputado de Ciudadanos y portavoz de Comercio Internacional, se dirigió a la Comisión Europea a través de una pregunta escrita y solicitó una investigación sobre el fraude en la exportación de tomates del Sáhara Occidental, que están etiquetados como si fueran de Marruecos, una práctica que viola las regulaciones europeas y el Acuerdo de Asociación entre la UE y este país.
Un informe de la ONG Mundubat indica que del 7 al 14% de los tomates que exporta Marruecos a Europa proceden de los campos de Dajla, situados en el Sáhara Occidental que está ocupado ilegalmente por Marruecos. Desde allí, se transportan a Agadir, territorio marroquí, donde se mezclan con tomates de la región de Sus. Finalmente se empaquetan y se etiquetan como producto del reino alauí.
“Vender estos tomates camuflados como tomates marroquíes viola numerosas leyes europeas y el Acuerdo de Asociación UE-Marruecos, que establecen que los productos que llegan a Europa deben llevar una etiqueta que indique el origen de su producción”, denunció Cañas. Por tanto, el consumidor europeo no tiene forma de conocer el origen real del tomate.
Además, afirmó Jordi Cañas, se trata de una competencia desleal contra los productores europeos y está reduciendo la producción de tomate en países productores como España.
Así, solicitó a la Comisión Europea que lleve a cabo una investigación sobre la presunta práctica fraudulenta denunciada en este informe y que explique cómo garantizará que Marruecos respete el Acuerdo de Asociación UE-Marruecos y la Decisión del Consejo 2019/217, sobre productos agrícolas cultivados en Occidente. Sáhara.
Esta no es la primera pregunta parlamentaria que se le hace a la Comisión Europea sobre este tema. En septiembre de 2019, Manu Pineda y Sira Riego se dirigieron al organismo europeo solicitando una respuesta sobre la importación ilegal a la UE de productos del Sahara ocupado por Marruecos .
Pidieron a la Comisión que evalúe el daño causado por la entrada de estos productos "tanto para la población saharaui, cuyos recursos se están agotando por las grandes multinacionales, como para la producción local de la UE". Además, solicitaron a la Comisión que evalúe si deberían exigir el etiquetado de los productos para indicar si realmente proceden de Marruecos o del Sáhara Occidental para que los consumidores puedan conocer su verdadero origen.
0 Comentarios