Sidi Maatala.
El consistorio italiano ha aprobado una aportación valorada en tres mil euros que destinará a 17 familias en un gesto que fortalece los lazos de la ciudad con la causa de un pueblo víctima de una gran injusticia internacional que desde hace más de 45 años espera una resolución pacífica a la invasión sufrida y que necesita apoyo humanitario, pero también y sobre todo político para que pueda regresar a su tierra, en el Sahara Occidental. “Este momento de pandemia tan difícil desde el punto de vista sanitario pero también económico, nos empuja a redescubrir el valor de la solidaridad y la cercanía con quienes viven su vida en condiciones muy difíciles'' escribió la concejala de Políticas Sociales Francesca D'Alessandro.
''Por este motivo, la administración municipal ha querido hacer un pequeño gesto de cercanía con el pueblo saharaui con la esperanza de que pronto podamos volver a acoger a estos niños que en nuestro país encuentran, aunque solo sea por el periodo estival, la oportunidad de ser tratados..'' agregó la concejala. Por circunstancias obvias, el verano pasado la emergencia sanitaria del Covid-19 imposibilitó, por primera vez en 20 años, llevar a cabo el proyecto de Vacaciones en Paz en Macerata como en muchos otros países involucrados, porque, como ordenó la ministra de Salud de la RASD, Jira Bulahi, los campamentos de refugiados tuvieron que cerrar las fronteras y todas las misiones de las en el territorio regresaron a sus respectivos países.
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