Para el Real Instituto Elcano, el cierre del gasoducto Magreb - Europa (GME) que pasa por Marruecos es una decisión acertada y beneficia más a España y consolida su estabilidad energética.
Por Sidi Maatala
Madrid (ECS). - El Real Instituto Elcano, dependiente del Ministerio de Exteriores de España, resalta en su último análisis sobre las crisis energética en Europa que el cierre, por parte de Argelia, del gasoducto Magreb-Europa (GME) que atraviesa Marruecos, es una decisión acertada y beneficiosa para España en su estabilidad energética, dado que se eliminó a un país tercero (Marruecos) chantajista.
El encargado de comunicación en la representación del Frente Polisario en España, Jalil Mohamed, ha analizado de cerca el informe del Real Instituto Elcano y nos ofreció una lectura detellada sobre a lo que él considera un nuevo cambio de enfoque respecto a Argelia por parte de este prestigioso centro de estudios estratégicos.
En su análisis, añade Jalil, el instituto de estudios estratégicos e investigación (Elcano) también reconoce el compromiso de Argelia para cumplir con los acuerdos de suministro de gas, algo que se ha demostrado durante décadas. "Hay un amplio consenso en que la seguridad de suministro energético de España está garantizada, incluso de cara a un invierno complicado en los mercados gasistas mundiales y europeos", aseguró Elcano en su análisis. Y añade "No se prevé por tanto una crisis de suministro energético y menos un gran apagón como el aireado con escaso rigor a finales de 2021".
El cierre de gasoducto Magreb-Europa ha evitado que Marruecos recurra a un instrumento de chantaje contra España. Mientras tanto, Argelia y España (Naturgy y Sonatrach) activarán este mes el cuarto turbocompresor del gasoducto Medgaz que conecta los yacimiento de Argelia con Almería para llegar a 10,5 millones de metros cúbicos anuales.
Para Elcano, a "diferencia de países centroeuropeos como Austria, España no tiene una dependencia extrema de una fuente sometida al impacto del cambio climático ni de un suministrador incómodo (hidroelectricidad y gas de Rusia, en el caso austríaco), ni tampoco países de tránsito de gasoductos tan complicados tras el cierre del Gasoducto Magreb-Europa, que discurre por Marruecos."
España está convencida de la declaración de Argelia de garantizar el suministro de gas a España a través del Medgaz. En plena crisis energética internacional, el CEO de la gigante argelina de Sonatrach en declaraciones al Canal Argelia 24, confirmó que España, hasta ahora, no ha solicitado ninguna cantidad de gas más allá de los previstos en los contratos, pero si es necesario, Argelia puede garantizar la demanda del mercado energético español.
Los meses que han transcurrido y el informa de Elcano, son una clara demostración de que las especulaciones alegadas por el lobby pro marroquí en España sobre el compromiso de Argelia con el suministro de gas, son totalmente falsas y no tienen fundamente alguno. También se desmiente la alarma sustentada por algunos periodistas sobre la inviabilidad del gasoducto Medgaz, que conecta Hasi R'mel directamente con Almería. Queda claro que ahora los contratos se siguen cumpliendo en beneficios únicamente de España y Argelia, sin la necesidad de otro intermediario (en este caso Marruecos).
El proyecto Medgaz fue adjudicado en 2006 por el Estado argelino por un período de 35 años (hasta 2041), prolongable por un período adicional de 15 años. A finales de 2019, Naturgy transformó su 14,95% en Medgaz en una participación estratégica del 49%, tras la compra a Mubadala de un 34,05% a través de un vehículo de propósito especial (SPV). Posteriormente, en marzo del pasado año, la compañía cerró con BlackRock la entrada de este en el SPV. Así, en la actualidad, Medgaz es propiedad de Sonatrach (con una participación del 51%) y Naturgy (con el 49% restante, a través del SPV en el que participa BlackRock) donde existe un acuerdo de accionistas que les otorga el control conjunto del gasoducto.
1 Comentarios
La verdad es que Marruecos no aportaba nada.
ResponderEliminarAhora bien, no estaría de más apostar también y muy fuerte por la energía solar y su conversión en hidrógeno de hidrólisis. Por mucho que el gas natural sea una fuente de energía más o menos manejable a hay que pensar muy en serio en parar el calentamiento global y asegurar que la energía sea producida localmente a partir del sol, viento y agua, que es perfectamente posible hacer ya.