ECS. Addis Abeba. | El Presidente de la República y Secretario General del Frente POLISARIO, Brahim Ghali, informó a los líderes africanos sobre la peligrosa escalada de acontecimientos en el Sáhara Occidental después del 13 de noviembre de 2020, día en el que Marruecos violó el acuerdo de alto el fuego. En su intervención durante la evaluación del informe del Consejo de Seguridad en África presentado a la 35ª Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Africana, Ghali advirtió de la situación en el Sáhara Occidental ocupado por Marruecos así como de que la solución estriba en la aplicación estricta del derecho internacional y disposiciones de la organización, de la que ambos países son miembros de pleno derecho.
Intervención completa de Brahim Ghali:
''Señor presidente;
En primer lugar, expreso mi pleno reconocimiento al Comisionado para la Paz y el Consejo de Seguridad y Paz junto a su equipo por el considerable esfuerzo que están realizando, ya sea en el marco del mandato encomendado al Consejo, o en la preparación del informe que se presentará y discutirá.
La República Saharaui quisiera expresar su total preocupación e inquietud por los sucesivos y peligrosos acontecimientos en el Sáhara Occidental que siguieron al 13 de noviembre de 2020, tras la violación por parte del Reino de Marruecos del acuerdo de alto el fuego firmado, bajo los auspicios de las Naciones Unidas, entre los ejércitos saharaui y marroquí, con su ocupación militar ilegal de nuevas partes del territorio de la República Saharaui. Las fuerzas marroquíes no solo han atacado a civiles indefensos saharauis y de países vecinos con armas avanzadas, al tiempo que desarrollan una política sistemática de exterminio. Más bien, las territorios saharauis bajo ocupación marroquí han sido testigo de una escalada constante en las violaciones de los derechos humanos similares a las que se somete a la ciudadana saharaui Sultana Jaya y a su familia, sin mencionar el saqueo masivo de los recursos naturales del Sáhara Occidental.
Todo esto sucede a pesar de que el estatus legal del Sáhara Occidental es cada día más claro, y se vio reforzado por la decisión del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas el 20 de septiembre de 2021 tras cancelar los acuerdos celebrados por la Comisión Europea con el Reino de Marruecos que afectan al Sáhara Occidental, considerando que el Sáhara Occidental y el Reino de Marruecos, según el derecho internacional y las decisiones del propio tribunal, son países separados y distintos.
La República Saharaui quiere señalar aquí que nuestra organización continental, en base a su deber y responsabilidades históricas, sólo puede estar presente, con fuerza y continuidad, en los esfuerzos encaminados a resolver el conflicto entre dos países africanos. Por lo tanto, el intento de reducir el papel de la organización, y de limitar todos sus denodados esfuerzos, durante muchas décadas, con respecto al conflicto saharaui-marroquí en la Resolución 693, es incorrecto no solo en vista de lo que la precedió, sino también en las muy importantes y claras decisiones que le siguieron.
Hablamos de decisiones como las de la cumbre ''Silenciar las Armas'' en diciembre de 2020, o la reunión del Consejo de Paz y Seguridad a nivel de presidentes en marzo de 2021. Ha quedado claro que esas decisiones, en un desarrollo natural, esperado y responsable, han superado el estancamiento injustificado en el seno de la troika.
Quizás sea importante recordar en este contexto que el Consejo de Paz y Seguridad ha expresado claramente su preocupación por el tema de los derechos humanos en el Sáhara Occidental ocupado y el saqueo ilegal marroquí de sus recursos naturales, junto a su exigencia al Consejo de DDHH de dar seguimiento a la situación y realizar una visita sobre el terreno a la región y la urgencia de acelerar la reapertura de la oficina de la Unión Africana en coordinación con la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental.
Finalmente, confirmamos ante ustedes una vez más nuestra plena disposición a trabajar con el Consejo y la Unión en general para llegar a una solución justa y definitiva al conflicto entre la República Saharaui y el Reino de Marruecos, en consonancia con las resoluciones de la Organización y las resoluciones del Consejo de Paz y Seguridad en particular, como dos países vecinos y miembros de la Unión Africana.
La República Saharaui quisiera reiterar con prudencia que nuestra organización continental no puede preservar su unidad, cohesión y progreso en su proyecto civilizado por el bien de África, sus pueblos y su próspero futuro sino mediante el respeto y la plena adhesión a los Estatutos Constitutivos de la Organización, especialmente los artículos 3 y 4, así como la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos.''
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