"Al no conseguir respaldo internacional, el fracaso ha supuesto una decepción enorme para Marruecos", canciller saharaui.

Por Salem Mohamed 

Madrid (ECS). - Desde que el expresidente de EE.UU, Donald Trump reconociera en diciembre de 2020 a través de un tuit la soberanía marroquí de partes del Sáhara Occidental, un delirante Marruecos activó toda su maquinaría diplomática, política y propagandística para lograr más apoyos en esta línea. Esfuerzos infructuosos que han arrojado cero resultados, pues hasta la fecha ningún país ha seguido el reconocimiento trumpista, ni siquiera sus aliados más acérrimos como Francia o Israel.

Rabat aprovechó la Reunión de la Coalición contra Estado Islámico (ISIS), celebrada recientemente en Marrakech, para hacer creer que su infame plan de autonomía para el Sáhara Occidental goza de un respaldo internacional y cuenta con el apoyo de otros países europeos, y ha destacado la nueva posición de Rumanía, Serbia, Turquía y Países Bajos. Sin embargo; eso está lejos de la verdad.

En este Ministerio de Asuntos Exteriores saharaui reaccionó y difundió un comunicado, al que ECSAHARAUI ha tenido acceso, y a continuación os ofrece su contenido integral:

"Después de cuarenta y siete años (47) de la invasión expansionista marroquí, Marruecos no podrá dar legitimidad internacional a su ocupación del Sáhara Occidental. Ningún organismo o tribunales internacionales y/o regionales reconocen la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental. Todos ellos, sin excepción, afirman el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, cuyo ejercicio es una vía obligatoria para llegar a una solución pacífica dada la naturaleza del conflicto saharaui como una cuestión de descolonización.

Marruecos ha evadido sus compromisos firmados con el Frente POLISARIO, -tras una devastadora guerra que se prolongó durante dieciséis años-, su violación de las fronteras internacionales reconocidas además de su continuo pisoteo a la legitimidad internacional y sus decisiones, le hicieron recurrir a la manipulación, falacias y mentiras para desorientar su opinión interna y ganar tiempo, para enfrentar una profunda crisis que le empuja cada día hacia lo desconocido.

Lo que ha ocurrido estos días en la ciudad marroquí de Marrakech, al margen de una conferencia sobre terrorismo, demuestra el grado de fracaso y debilidad en el que se encuentra el ocupante marroquí.

El recurso de la diplomacia marroquí a un intento de acusar de terrorismo y separatismo al pueblo saharaui y al Frente POLISARIO, su único representante legítimo, refleja la prueba más contundente de la profundidad de la situación marroquí y la decepción que aflige al ocupante marroquí, lo que le hizo difundir deliberadamente declaraciones inventadas y atribuidas a algunas de las delegaciones participantes expresando, según sus afirmaciones, su apoyo a su proyecto de expansión anexionista que lo llama “autonomía”. Sin embargo, las delegaciones que pudieron ver lo publicado en nombre de sus países, tomaron la iniciativa de desmentir las declaraciones del Ministerio de Asuntos Exteriores marroquí, que está librando una batalla con el tiempo para dar caza al mayor número de delegaciones participantes y emitir declaraciones falsas en su nombre.

Repetimos una vez más que por muy astuto que sea el ocupante marroquí, utilizando falacias, mentiras, sobornos y cualesquiera que sea el descabellado método, incluso las pirias adolescentes e infantiles en las que incurre, no conseguirá suprimir la realidad nacional que encarna la República Saharaui.

La guerra entre la República Saharaui y el Reino de Marruecos no terminará ni se detendrá hasta el final de la ocupación ilegal marroquí y la consecución del pueblo saharaui de todos sus derechos a la soberanía, la independencia y la integridad territorial."